martes, 31 de julio de 2007

Campanas al vuelo

- ¡Me caso, me caso!- gritó mi vecina escaleras abajo, a la vez que llamaba a todos los timbres que tenía a mano.
Los vecinos la insultaban e incluso vi como alguien le tiraba una maceta, directa a la cabeza, que ella esquivó con maestría. Mi vecina esta era tonta desde pequeñita, pero muy guapa. Nunca tuvo un duro y no faltaron los novios (mucho menos el sexo salvaje al que nos tenía acostumbrados, sobre todo aquella vez en la que la cama se partió, como si yo hubiese estado saltando en ella, pero ella y su pareja siguieron dale que te pego sobre el colchón). Su padre era uno de esos albañiles de tópica estampa y su madre una educada ama de casa a la que le daba por amaestrar tortugas cuando le llegaba la menstruación.
Mi vecina se llamaba Yolanda y no era mucho mayor que yo. Por esa época rondaría los veintiuno y siempre dijo, desde que conoció a su primer y único amor, que era el hombre más dócil y sérvil que jamás pudiese conocer. Fue por ello, y por el dineral que su padre tenía, por lo que se casó con él.
Su padre, el del novio, era un empresario de la fresa, de esos invernaderos donde trabajaba mi amiga la Princesa. ¡Ay, si el novio era dócil es porque la Princesa lo mataba a casquetes (no polares) bajo el plástico de los invernaderos. Sí, Yolanda no sabía que su novio era infiel antes de que se diesen el primer beso, porque mi Princesa es mucha Princesa y con solo chasquear los huesos de sus caderas, anchas, de mujer fértil, tiene a mil hombres esperándola, ya sea en la piscina de Lepanto ( y V al que se la levanto) o en cualquier bar de nombre anglosajón.
Yolanda nunca sabrá que su marido le fue infiel, y nunca sabrá quién es la Princesa a la que tanto debería odiar. Pero Yolanda es un poco lela (tonta del culo) y traga lo que haga falta (¡ey, como la Princesa!).

Un saludo al rey de Polonia, o de Cracovia... que vaya hija tiene usted.

jueves, 26 de julio de 2007

Ave María chunguísima




Hace unos días salió en las noticias ese pequeño y piscinero pueblo: Villatranca de cuyo parque acuático no quiero acordarme. ¿Será porque estarán anunciando que las entradas serán más baratas... o quizá que se van a independizar de la provincia? Pensé. Pero no, para mi suerte o desgracia era un tema de índole religiosa, sexual y con rumano de por medio. Osea post en mi blog asegurado. Todo empezó aquel domingo en misa de once, el cura sodomita con cierta debelidad por el cuerpo de cristo hecho vino, salió de su Iglesia con las manos en los bolsillos y se encontró allí a un rumano mendigando. Fue un flechazo instantaneo pero con grumitos, y le empezó a temblar la sotana. Supo, en seguida que lo quería tener cerca de él, así que lo contrató para hacer las tareas del hogar en su finca católica y perversa. El rumano aceptó encantado sin saber lo que le esperaba. Su trabajo no consistía solo en limpiar el polvo o pasar la escoba, de vez en cuando y cada vez más a menudo tenía que poner sus nalgas mirando hacia Transilvania y dejarse atar con el rosario dominical. Maldecía a Ceaceascu mil veces porque por su culpa el tenía que estar aqui, en otro país ultrajando el sexto mandamiento, y sodomizado perdio'. Ya no podía aguantar más, el sa-cerdote le iba la marcha que no veas y él no se podía ni sentar... y al séptimo día descansó. Cogió la Biblia, y la abrió por el Salmo de David, y la estrelló sobre la cabeza al aprendiz de diocesano que cayó desplomado. Amén dijo sacando su acordeón y bailando esas danzas rumano-cántabras, tan eslavas. Luego saqueó la casa del cura con alma de Moulin Rouge y se fue para su tierra natal a chapotear en el Danubio, mientras el sa-cerdote se desangraba como el cordero de Dios que quita la sodomia del mundo.


lunes, 23 de julio de 2007

Muñón duro

Me preguntaba, en una de mis colgadas diarias, como tiene que ser tener un novio sin mano, es decir, que su mano no fuese una mano, si no una muñeca, es decir, un muñón. Algo especial, digo yo.
Por ejemplo, y ya que este es un blog pseudosexual, imagínense que un muñon las penetra: es más ancho, es más duro y es más... como decirlo... ¿lisito? Sí, algo así. Además de que la gente con muñón puede hacer infinidad de cosas, bueno, todo menos abrir botes, por ejemplo, de mahonesa, cosa que le tiene que costar un montón.
Ya saben que el amor es libre, y sino que se lo digan a mi amada, desde el sábado más, amadísima Princesa Polaca, una persona que, gracias a su boca, lo ha probado casi todo en esta vida, bueno, menos el tabaco, creo.
Con la Princesa no hablo de estas cosas (ya saben que ella de español poquito pero de griego y francés un rato), ella es alguien especial que sabe de todo menos de muñones. De nadadores, de rumanos, de humorista ingleses, de servicios públicos... pero de muñones muy poco.
Los muñones son un mundo por descubrir, algo especial, es como al que no le gusta que le coman el lobulillo de la oreja, pero que al final acaba cediendo, o al que no le gusta el reggaeton pero acaba bailando. Les recomiendo que prueben un muñón por mi, yo nunca lo haré. ¿Y entonces por qué lo recomienda? Porque alguien debe de actualizar el blog, carajo, que hay que explicarlo todo.

Aunque este, por la espada que tiene, también parece un muñón.




viernes, 6 de julio de 2007

Estabamos sentados Berma y yo en un bar de la Avenida Barcelona, sí ese sitio en el que todo cordobés o simplemente no-polaco frecuenta una vez en su vida, pensando en darle una solución a esto de que todos quieren participar en nuestro blog y no puede ser. Ya está. Miles de comentarios nos llegan para ser uno de nosotros, para dejarsetocar; no obstante me he decidido a dejar una encuesta para que todo aquel que quiera formar parte nuestro selecto grupo de dos, conteste y el gran gran Bermauntier y una servidora, meretriz y eslava, nos decidamos a admitios o no...

1. ¿Has tenido relaciones pseudo- sexuales con un borbón?

a) Sí, una vez en el cuarto de baño de un bar.

b) No, no quiero hijos hemofílicos.

c) Ni sí, ni no; simplemente no me acuerdo.


2. ¿Eres falangista, escuchas la Cope, y crees en el pecado carnal?

a) Sí, pero luego violo niños.

b) No, soy el che guevara

c) Escribo en El Mungo


3. ¿A que piscina vas? (Dato fundamental)

a) Al fontanar, me encanta que me roben mientras me baño.

b) A Lepanto, por supuesto, la mejor piscina. El cesped más amplio, los árboles más altos, el vestuario más acogedor...

c) A la alberca de mi pueblo.


4. ¿Qué personaje español te parece más imprescindible para la Historia Contemporánea?

a) El fary, ay torito...

b) La madre del Frey, Perchedes.....María de las Mercedes no te vayas con tu sillaaaa

c) Tejero ¡Se sienten coño!


5. ¿Que te llevarías a una isla desierta?

a) Un picardías con ligeros

b) Un libro de Padi- Padi, firmado.

c) Un dildo y su correspondiente recargador.


6. ¿Quieres que Chilipe y Petizia reinen?

a) Espero, que cuando Juanki muera, ellos también hayan muerto ya.

b) Prefiero que reine la Princesa Polaca con Juanki I de Lepanto.

c) Quiero que se acabe la monarquía hemofilica, y los viajes estivales a Mallorca, cojones ya.


7. ¿Te has tocado pensando en Marichalar con la capa, sólo con la capa?

a) A menudo, incluso sin poder controlarlo.

b) Jooo solo fue una vez.

c) No, me da repulsión.


8. ¿Qué tipo de música prefieres?

a) Regaeton cani, puro y duro.

b) Verdi, Mozart y La Hungara

c) La cabecera de los telediarios


Hasta aquí este cuestonario eslavo, quien quiera participar en este bloj ( asi se dice en polaco) solo tiene que contestarlo, de los favores sexuales ya hablaremos en otro momento.

domingo, 1 de julio de 2007

Ansar no es de este planeta

La Princesa Polaca me llamó anoche sobre las cuatro de la madrugada, justo cuando yo atacaba furtivamente el frigorífico de mi chabolo, para decirme que en ese mismo instante estaba en un bareto de la Avenida Barcelona con Mich Bukanan.
Pensé entonces en cuánto daño había hecho la foto de los Ozores, que no de las Azores, y me vino a la memoria un par de conferencias en JorgePueblo (GeorgeTown para los nativos) donde Ansar hablaba y hablaba y hablaba... pero, casualmente, no se le movía el labio superior.
Supe entonces de quién era la culpa: Encarna Sánchez. Mala como un dolor de muelas, con el corazón negro como el carbón dulce de las navideñas Navidades, Encarna Sánchez, desde su tribuna de la Pope (o Cope, o Rope, o Tope, o qué sé yo) había apoyado a un joven Ansar que se presentaba a las elecciones con ganas de guerra y de montárselo en la cama de matrimonio de La Mon-cloa (¿como las ranas?, no es con r, es decir, croa).
Creo ChecheMagui es un gran tipo, algo superior al resto de los humanos y al que no le gusta que conduzcan por él, y yo lo entiendo, así, el semáforo en rojo se lo harán a él y no a otro, como a Rato, a Acebes, al siempre morenísimo y agitanado Zaplana, o a Álvarez Chascos.
Se dejó melena como los pijines de El Brillante (que no se pasa) y supo que su destino era molestar a un presidente masón y comunista en memoria de un séptimo piso, una azotea y un médico que hizo fotos al tito Paco, o incluso al Tita Paco, cuya memoria querían pisotear haciendo esa ley de la memoria histórica.
Ansar vino un buen día desde un planeta muy, muy lejano, acompañado de una mujer que se hacía llamar Botella y que era de la familia de los Iwoks, ya saben, esos peluches que salvaban a la Princesa que Leia (no puedo usar el nombre de Princesa Leia por eso del copyright). Aparcó su nave en un descampado, posiblemente la casa de campo, donde un travestí los asaltó y les dijo: Oish, maricón, vaya pintas de siesaco llevas ensima, anda que si dieses conmigo... te iba a poner el culo como un bebeero patos. Ansar no entendió muy bien y fue desvalijado por un grupo de locas que habían salido de Tacones Lejanos, película de Almodóvar (del Río).
Se presentó a las elecciones y las ganó, pero no gobernó satisfecho, algo le dolía en su corazón y es que su familia se había quedado allí, en su otro planeta, en su otro lugar: en el bareto de striptís donde nació.
Para intentar sacarse esta espinita tuvo hijos, mucho hijos y dicen que se afilió al Opus, o que era de la Falange (falangina, falangeta) y que por eso vestía de azul y mantenía cierta relación poco ortodoxa (y muy sexual) Monseñor Rouco Sifredi (chiste facilón, ¿eh?), pero al Iwok de Botella no le importaba y lo permitió.
Fue presidente dos veces e hizo buenas migas con un chimpancé y con estirado inglesito fan de las películas de Martínez Soria, fue entonces cuando dijo: estamos trabajando en ello... y no estaban trabajando, se lo estaban trabajando de modo vestial y recordó aquel encuentro con el travelo y se dio cuenta del significa de te voy a poner el culo como un bebedero de patos, porque bien que se lo hicieron y casi sin parar, día tras día, día tras día...